De mi pasión por este tipo de galletas, tiene la culpa Bea Roque ella es la persona de la que más he aprendido sobre todo lo que tenga relación con las galletas decoradas. Me fascinaba ver esas pequeñas obras de arte en cientos de páginas, y cuando llegué a su Blog descubrí a la profesora perfecta sobre masa, glasas, técnicas...., etc.
Ahora que estamos con los Oscars, yo tendría clarísimo que : And the Oscar goes to .... Bea Roque por todas las galletas fantásticas que hace y que nos ha enseñado como hacer!!!
Estas galletas que os presento hoy están hechas, por supuesto, con su receta, tanto la masa como la glasa, espero que a Bea no le importe que la ponga aquí. Aunque como es tan laboriosa, hoy solamente voy a empezar con la masa y dejaré la glasa y la decoración para otro día.
Las galletas las hice, primero para probar a ver como me salían, y segundo, para regalar a un niño que cumplió 1 año el 17 de febrero. Quería darle a su madre una sorpresa especial, así que hice todas las letras de su nombre y un 1 por el año que cumplía. Por determinadas circunstancias no pudieron celebrar ese día como hubiera querido su madre, así que ahora que ya lo van a celebrar con una gran fiesta de familia y amigos, voy a empaquetar las galletas y enviarlas por correo para que lleguen a tiempo para la celebración del pequeño.
Aunque están hechas con todo el cariño del mundo, no me han salido del todo como a mi me gustaría, he cometido algunos fallos, que espero me sirvan para que las próximas salgan muchísimo mejor que éstas!!!
Para la masa:
250 gr. de mantequilla a temperatura ambiente
250 gr. de azucar glass
1 huevo XL a temperatura ambiente
650 gr. de harina
1 chorrito de leche (Yo le he puesto 4 cucharadas)
Aroma al gusto del consumidor ( Yo he puesto 2 cucharadas de extracto de vainilla)
Batimos la mantequilla durante unos minutos hasta que esté cremosa. Sin parar de batir, añadimos el azucar glass, que habremos tamizado, a cucharadas, hasta que esté totalmente integrado. Dejamos de batir y echamos el extracto de vainilla y el huevo batido. Cuando se haya mezclado todo continuamos batiendo y añadimos la harina tamizada, a cucharadas. Cuando hayamos echado casi toda la harina la masa se empezará a desmigar, en ese momento ponemos la leche, yo he usado 4 cucharadas, pero dependerá sobre todo de la humedad del ambiente, así que cuando veas que la masa hace una bola y se despega de las paredes del bol donde estés batiendo, será que está lista. Si te pasas con la leche siempre se puede añadir más harina.
Cuando la masa está lista la colocamos sobre la encimera y la cortamos en 4 trozos. Cogemos 1 de los trozos y le damos forma rectangular, ponemos la masa entre 2 papeles de hornear y amasamos con un rodillo, tenemos que conseguir que el grosor de la galleta sea uniforme, yo utilizo un rodillo de Joseph & Joseph y hago las galletas de 10cm. de grosor, pero se pueden usar 2 cucharas de madera en los extremos del rodillo, o unas tablillas o incluso poner unos aritos en los extremos del rodillo... hay varios métodos, pero para mi el mejor es mi rodillo.
Una vez estirada la masa, se coloca en una bandeja y se mete en la nevera, hacemos lo mismo con los otros 3 trozos y colocamos la masa estirada, una encima de la otra y así la dejamos en la nevera 24 horas.
Ahora que tenemos la masa bien fría, retiramos el papel de hornear de encima y cortamos con los cortadores de galletas a nuestro gusto y vamos colocando las galletas cortadas en una bandeja de hornear. Con los recortes sobrantes volvemos al mismo proceso del principio, ponemos entre dos papeles de hornear, estiramos y vuelta a enfriar.
Una vez que tengo las galletas cortadas y puestas en bandejas, las meto en el congelador y cuando están completamente congeladas, las guardo en bolsas (para ocupar menos espacio). Nunca horneo galletas el mismo día que las hago, es un poco dificil con un bebé en casa :D
Pero si las quereis hornear ese día, hay que dejarlas, una vez cortadas un mínimo de 3 horas en la nevera.
El día que voy a hornear saco las galletas del congelador y las coloco en la bandeja procurando que todas sean de un tamaño parecido para que así se horneen por igual. Se ponen en horno precalentado a 180º (calor superior e inferior) unos 18 o 20 minutos, el tiempo dependerá del horno pero hay que tener mucho cuidado y vigilar bien el horno porque una diferencia de 1 minuto o 2 puede ser fatal para nuestras galletas.
Cuando sacamos las galletas del horno las quitamos de la bandeja (porque sino se seguirian cociendo) y las dejamos enfriar en una rejilla. Como no tengo en casa rejilla para enfriar galletas, utilizo las bandejas de horno de rejilla.
Y una vez frias las guardo en una caja de lata que las conserva perfectamente hasta que las quiera decorar. También suelo poner en la lata una bolsita de gel de sílice (son estas bolsitas pequeñas que vienen en los bolsos de piel o chaquetas ) que, por si no lo sabíais, hace que las galletas no se humedezcan y son aptas para poner con alimentos, este truco me lo contaron en un curso de cocina y va fenomenal.
Espero que os haya gustado, aunque la receta es larga, os aseguro que no es nada pesada de hacer y es más facil de lo que parece.
Pronto, la receta de la glasa y la decoración y más fotos del proceso, que me he dado cuenta que aparte del resultado final, son útiles las fotos del "como se hace"